El ACIDO HIALURÓNICO es el tratamiento más de moda entre las celebrities y famosos, pero cada vez más accesible para toda la gente, para cualquier persona que piensa en hacerse un pequeño retoque rellenando arrugas o surcos con este magnífico producto.

Es un material reabsorbible, que forma parte de nuestro organismo, por lo que no necesita pruebas de alergia y no suele inflamar mucho la zona tratada. Hidrata la piel y estimula la síntesis de colágeno propio y bien utilizados, aportan volumen allí donde se necesita, logrando de forma cómoda, resultados inmediatos, muy naturales y sin modificar la expresión.

Se inyecta utilizando una pequeña aguja o cánula fina y no es doloroso. Si se precisa se puede inyectar una pequeña cantidad de anestésico local en la zona y normalmente el mismo producto ya lleva anestésico en su composición para hacer más cómoda su aplicación.

El ácido hialurónico se ofrece en diversas presentaciones con diferentes densidades para distintas indicaciones. No utilizamos el mismo tipo de hialurónico ni la misma técnica de inyección según queramos rellenar arrugas finas, pliegues más profundos o aportar volumen en áreas más importantes. Cuanto más denso es el producto más profundamente debe inyectarse y mayor duración tendrá (habitualmente un año).

Este producto tiene multitud de ventajas que hacen que sea el relleno más conocido:

.Se coloca fácilmente en la consulta y no requiere quirófano ni hospitalización

.Produce buenos resultados si la indicación es la adecuada

.Los resultados se aprecian inmediatamente

.No hay problemas de añadir más producto en sucesivas visitas si fuera necesario.

.Al ser reabsorbible, si quedara en exceso en alguna zona o el resultado no fuera del agrado del paciente, el paso del tiempo se encargará de eliminarlo.

Para evitar problemas es importante buscar un buen profesional con experiencia y conocer el tipo de ácido hialurónico que van a utilizar en el tratamiento porque hay materiales de diferentes calidades y precios y que, por supuesto, no son igual de efectivos ni duraderos.